Esta es la conversión que nos aguarda a todos. Lo que sucedió el día de Pentecostés fue escasamente la inauguración; el evento nos sigue envolviendo a todos los que lo aguardamos con el corazón ardiendo por la audición de la Palabra de Dios y la oración.Dios ha colmado de dones a todos sus hijos e hijas, y es en esa riqueza y amplitud de Hu